La obsesión.

Para Alicia con cariño.

Aquella semana Alicia tenía turno de mañana en su trabajo, por la tarde decidió ir al parque de la Ciudadela. Paseando llegó al estaque que está entre el Parlament y la iglesia castrense, se sentó en el mármol que lo bordea, los peces de color salmón esos que ponen en todos los estanques, se arremolinaban esperando unas migajas de pan, era media tarde Alicia pensaba que quizá la vida de ellos era más sencilla.

Una señora la estaba mirando y se le acercó. Puedo sentarme aquí? Le preguntó.

Claro es un sitio público respondió. La señora le dijo. Muchacha te veo preocupada, puedo ayudarte? ( a veces a un extraño es más fácil confesarse). Alicia se soltó enseguida explicándole un tema personal que le acuciaba grandemente y no sabía como solucionar. Por lo que le comentó. La señora vio enseguida de que se trataba y le dijo que eso se llamaba obsesión. Lo sé, respondió ella, estoy en terapia, pero me cuesta remontar.

Mira voy a explicarte si me lo permites como es este tema y tú me darás la razón, o lo que creas al respecto.

La persona que padece de esta patología lo hace generalmente por su propio beneficio, no por el objeto de su obsesión, sino para obtener reconocimiento y estima de los demás, esa entrega aparentemente desinteresada esconde una búsqueda de recompensa afectiva, desea que la valoren, que la quieran, que la reconozcan, (pueden llegar a pensar que son mejores que los demás en alguna situación en concreto y por ello acaban perjudicando a todos los implicados) la persona en sí por descontado, no es consciente de lo que hace y mucho menos del porque.

Las obsesiones generan acaparamiento y hacen dificiles las relaciones con los demás. Como sabrás hay diferentes tipos de obsesión, las familiares de padres a  hijos de abuelos a nietos etc, luego hay las de pareja, he conocido algunas personas con estas patologías, tanto de las familiares como de las de pareja, en estas últimas he visto como se desmadejan para agradarles, dejando de lado a su propia familia, por miedo a perderla con celos exacervados, anulándose a sí mísmas/os, ahogando al receptor/a y no encontrando en ese frenesí tampoco la compensación que esperaban recibir.

Nuevamente, un. Yo soy quien más te quiere, tu no me lo demuestras, no te comprometes suficientemente conmigo y un largo sainete, que acaba haciendo el efecto contrario, vemos aquí una situación de búsqueda de reconocimiento y estima del objeto del deseo, generalmente a cualquier precio. A causa de esa obsesión por ser queridos.

Lo que les dan generalmente nunca es suficiente. Así, el receptor de los afectos obsesivos se deja querer/cuidar y no hace el mínimo esfuerzo para dar el afecto requerido, pues se acomoda a que le mimen desmesuradamente por lo que al final se genera un desgaste en el dador que se salda con problemas de salud y por supuesto de relación.

Luego hay las personas que por hipocondria sufren constantemente la sensación de estar enfermos, todo es muy complicado a su alrededor, acuden constantemente al médico, se sienten muy sensibles con el entorno, miedo a la enfermedad, miedo a la muerte, a la pérdida etc. Todo lo que reciben de los demás parece que nuevamente no es suficiente, creen que hablan mal a sus espaldas, que no agradan, etc. aquí nuevamente nos volvemos a encontrar con el tipo de persona que manipula a su entorno manteniendoles en vilo para atraer su atención en un quiero que me quieran, que estén por mí porque por mi mísmo/a no valgo lo suficiente y he de hacer algo para llamar la atención de los demás y que me vean. Esta es la apreciación de los que padecen esta patología, sea cual sea la forma de actuar siempre la base es la búsqueda de reconocimiento, aceptación y afecto,o sea una gran falta de autoestima.

En algunos casos esa desmesurada obsesión crea dependencia en el receptor, el cual queda generalmente anulado y a expensas del obseso, con el tiempo el primero acaba perdiendo la amistad, naturalmente por desgaste emocional de la mísma, pero no sin antes haber dejado una dolorosa herida en el interior del receptor/a, que le sera bastante dificil de sanar y además de un sentimiento de culpa que puede transformarse en rabia, ya que se da cuenta que todo aquel aparente cariño y dedicación era solamente para llenar su insatisfacción y falta de afecto (su ego),

Apegos al fín por falta de madurez.(Como he dicho antes algunas personas no son del todo o nada conscientes).

Hay diferentes formas de manifestar los apegos/obsesiones, pero la base siempre es la mísma, tal como te he comentado anteriormente.

Otro problema puede generarse de estas situaciones. Como sabes, todo está en la mente, y esta no diferencia si la dependencia es por una droga química o por una adicción emocional su forma de actuar es la mísma, reconecta diariamente con los trasmisores neurológicos correspondientes al apego emocional a la que es adicto y segrega unos péptidos que a través del flujo sanguíneo se insertan en las células. Durante mucho tiempo de dependencias emocionales y generar esas sustancias químicas el cuerpo se deteriora y envejece, enfermando, lo que te explico puedes contrastarlo y en ningún momento es para asustarte, es simplemente un consejo para que tomes conciencia del tema por tu propio bién, debes saber que las adicciones/obsesiones son un gran desgaste para el organismo y tarde o temprano se pagan las consecuencias.

Que hacer?.

Ser consciente.

Esa es la primera cosa, después buscar la ayuda de un profesional, pero sobre todo intentar cambiar la actitud y reconectar todos los días con un nuevo estado mental, reconocerte como un ser maravilloso que ha venido con un propósito, entre ellos mejorarse a si mísma, procurar ser feliz y por ende a los demás, agradecer cada día la maravillosa familia que tienes, tu trabajo, tus amigos, tu vida, ni tú ni nadie merece sufrir por las propias adiciones emocionales(obsesiones) y mucho menos quien tanto te quiere, familia, amigos y un largo etc, como seguro es así.

Ser consciente que no puedes vivir la vida de los demás y cargar con sus historias personales, ya que si emocionalmente te implicas con ellos y vives su experiencia como si fuera la tuya con todas las consecuencias de infelicidad que ello conlleva, entonces dejas de vivir tu propia experiencia y no evolucionas como todo ser humano a venido a hacer.

Te mereces estar bien, depende en gran medida de tí.

La señora se despidió con un abrazo que enterneció mucho a Alicia, habia anochecido, le había pasado el tiempo muy deprisa, cuando se giró para verla solo había un rastro de luz purpúrea por donde se había marchado, Alicia sabía que no la vería más tal como la percibió en ese momento, pero si de otra forma, al igual que a otras personas que la ayudarían, era solo el principio de un gran cambio.

Mañana será un nuevo día. Una nueva oportunidad, como todos los días de nuestras vidas.

Lo conseguirás, tienes más fuerza de la que tu mísma eres capáz de conocer. Si no fuera así no te reconocerías en esta situación, lo cual dice mucho de tí. Nadie debe dudar en solicitar ayuda. Así debe ser.

Se felíz, te lo mereces, eres maravillosa.

Gracias por leer mis historias.

Luz y progreso para todos.