La cámara mágica.

Dedicado a Maribel Portolés con mucho cariño.

Esta historia la escribí para ella hace unos pocos años y ahora sale al universo como todas mis historias. Siendo una plegaria para cada uno.

Había una vez en las ruinas de una casa abandonada, una vieja cámara de fotos.

Años y años estuvo allí olvidada. Hasta que un día una muchacha llamada Maribel la encontró, Hacía tiempo quería tener una. Muy amante de la fotografía quedó encantada con el hallázgo, la cogió y la llevó a su casa. La cámara era un modelo muy antiguo aunque parecia estar en muy buén estado .La enseñó a su familia y pensaron que había tenido mucha suerte al encontrala.

Un día fue de excursión y se la llevó para probarla, hizo muchas fotos. Al día siguiente llevó el carrete para que lo revelaran y la sorpresa al recogerlas fue
enorme. Lo que se había positivado en el papel eran paisajes superpuestos de bellísimos colores, lugares inimaginables que jamás había visto. Fue a la casa de fotos para comentar que posiblemente se habían equivocado al darselas,o bién hubo un error en el revelado, ya que aquello no correspondía con lo que ella había retratado. Ellos verificaron los comprobantes y no parecía haber error alguno.-

Maribel no pareció quedar muy convencida. Unas semanas después volvió a marchar de excursión esta vez al mar, hizo muchas fotos, que llevó a revelar al día siguiente. Nuevamente aparecieron paisajes extraordinarios, mares de color turquesa con palacios sumergidos bajo el agua, columnas y plataformas de piedra rosada cubiertas por las cristalinas aguas de un mar que no era de este mundo. Extrañadísima y sin poder encontrar respuesta a ese suceso, no sabía que hacer y tampoco sabía si seguir haciendo fotos con aquella cámara tan especial.

Pero un día mirándola le surgió una sensación y fue que la fotografiaran a ella, así que pidió a su padre ( El nos dejó el año pasado. Que la luz ilumine su camino siempre.) que la retratara. Así se hizo, al revelarlas quedaron asombrados con el resultado. Se veía así mísma más allá de su propia imagen, se vio realmente como era, un arco iris de colores brillantes, llena de luz, colores iridiscentes corolaban su aura, a medida que iba pasando las fotos veía fluctuar los colores debido a sus cambios anímicos, supo que aquello era verdaderamente su esencia. Que su imagen aparente era solo un producto de su ilusión egótica, un sueño en el sueño de la humanidad, aquel en el que nos vemos inmersos.

Una creación mental, gestada por la mente cósmica, en la que en nanosegundos proyectamos jugar solos y separarnos para experimentar en el gran tablero universal que elegimos para ese menester.

Así esa cámara que un día se encontró,( no por casualidad ). Le mostró que todo lo que vemos es producto de esa gran mente. Un pensamiento colectivo ilusorio que recrea lo que quiere ser. Nuestra realidad trasciende por encima de lo imaginable, somos más que un estado mental inconsciente. Somos luz, somos amor, esa es nuestra materia prima. Y no el proyecto ilusorio que estamos recreando con el sufrimiernto que conlleva nuestra aparente separación.-

Y eso vió Maribel a través de las fotos.

Cada uno tiene su momento para trascender y ver más allá de su ilusión.

Y esta es la historia de la cámara mágica, nuestra historia. Hay una cámara mágica para cada uno de nosotros. Solo tenemos que encontrarla y comprenderemos el proceso durmiente en el que estamos inmersos. Que todos somos uno, y que ya a llegado el tiempo de salir del sueño y ver más allá de él.

Con mucho cariño y una inmensa fortuna de luz, amor y progreso para tí Maribel y para todos.

Como siempre gracias por leer mis escritos. Son oraciones.