Esta historia está dedicada a mi compañera de piscina Teresa, a su hijo y sobre todo al pequeño Stalin, bisnieto y nieto respectivamente de los antes mencionados.
Stalin es un niño de unos dos años y medio aproximadamente que actualmente vive en un centro de acogida de la Generalitat, en Barcelona.
Fué dejado allí por sus padres. A su abuelo y su bisabuela,se les dejó en acogida un tiempo pero por la edad de Teresa y que su hijo no tiene trabajo fijo, fue devuelto al centro, por lo que actualmente solo lo pueden ver una vez al mes, un ratito el sábado por la tarde, a ellos les gustaría poderlo volver a tener en su casa, pero por lo mencionado anteriormente el pequeño sigue en el centro de acogida.
Bién tratado según información de Teresa. Todo hay que decirlo.
Como este caso lo conozco de primera mano y lo voy siguiendo, he querido en un día tan especial como el de hoy, dia de reyes 2015, regalarles esta historia, que como ya sabeis al leerla se moverán energías , pero como siempre el universo posiblemente hará lo predeterminado.
Sabemos que desgraciadamente hay muchos casos como el de Stalin. Siento el sufrimiento de Teresa y el de su hijo, por no poderlo tener y darle el cariño que necesita todo ser humano, al igual que otros tantos que se encuentran en la mísma situación o similares. Que esta historia de cariño sirva también para todos estos pequeños, que aguardan una familia que les quiera.y también como oración.
Ese fin de semana en los que Teresa y su hijo tenían al niño de visita en casa. Ella le dijo.
Cariño quieres que te cuente un cuento?
El la miraba con esos ojos traviesos e inocentes y le sonreía, con la cabeza le dijo que si.
Escucha.
Había una vez un niño y una niña como tú, que eran amiguitos, todos los días iban a pasear con la cuidadora del centro, por un jardín muy cercano, era muy especial, estaba lleno de flores y fuentes, siempre lucía el sol, habia columpios ensortijados con las más bellas enredaderas, la niña se sentaba en uno de ellos y el niño la empujaba, siempre jugaban juntos.
Neus, su cuidadora, los vigilaba con mucha atención, también participada de sus juegos, era una mujer joven y amorosa, le gustaban los niños y los atendía con mucho cariño.
Ese día los peques ya cansados se sentaron bajo un árbol muy grande, hacía calor y la sombra del árbol les refrescaba.
Los dos de la mano se hablaban en su idioma infantil y siempre jugaban ajenos a su realidad. Se querían mucho y compartían todo el tiempo que podían. Neus,se sentó con ellos y les dijo.
Os voy a explicar una historia mágica, en la que vosotros sereís los protagonistas, será nuestro juego de hoy.
Los pequeños alzaron sus bracitos para que Neus les hiciera mimos, todos reian contentos.
Estabais como todos los días en este bello jardín, jugando.
Pero esa mañana llena de sol, cuando María estaba sentada en el colúmpio y tú escondido entre las flores intentando atrapar a una mariposa, tres pequeños ángeles bajaron del cielo a jugar con vosotros, uno columpió a María, el otro fue a buscarte entre las flores y te puso la mariposa en tu manita para que la acariciaras, mientras el otro recogía flores que ponía a vuestros pies.
Pasó la mañana muy rápido, lo pasasteis muy bíén con ellos, yo estaba encantada con vuestros nuevos amiguitos, os prometieron que volverían todos los días a jugar, hasta que pudierais estar con una familia que os diera todo su cariño.
Y así fue, cuando volvíamos aquí a este jardín en el que siempre hacia sol, los pequeños ángeles bajaban para acompañaros, eran incluso más juguetones que vosotros.
Entonces entendí el porqué. Seguramente siempre habían estado aquí , me pareció muy providencial que fuera ahora concretamente que hubieran querido que los vieran y eso para mí fue una buena señal.
Viendo a mis pequeños jugar con los querubines, me di cuenta que a Maria y a Stalin no les parecia nada extraño ver unos niñitos con alas, esa maravillosa inocencia que no ve mal, que no cuestiona, que simplemente fluye.
Hay tantas cosas que los pequeños nos pueden enseñar.
Para mí ha sido una experiencia maravillosa que viniera a mi este pequeño cuento y contárselo a los niños.Se que están protegidos. Quien sabe si gracias a la inspiración de esta historia algunas cosas se arreglarán en la vida de estos pequeños. Incluso en la mía.
Neus, sabía que era un cuento, no entendía como le nacía tan real y tan convincente, nunca se le habia ocurrido explicar una historia de ángeles, pero de alguna manera percibía que estaban allí.
Más, más,todos los días los pequeños le pedian su cuento, la escuchaban embelesados, aun siendo la mísma historia, incluso a ella mísma le parecia distinta. Neus los abrazaba y pensaba.Ojala algún día no muy lejano, todos estos niños del centro encuentren el calor de una familia que los acoja y les de el amor que tanto merecen.
Neus pensaba.Se que no podemos juzgar las circunstancias que empujan a esos padres a abandonar a sus hijos, pues cada uno tiene sus motivos, aunque no podamos comprenderlos. Los valores espirituales deben trasmitirse con el ejemplo, enseñar a ver la belleza de cada cosa, a agradecer, a perdonar, ser compasivo y no juzgar, todo ello nace del amor.
Al otro lado del cuento,Teresa estaba muy sorprendida de haber estado tan inspirada, el pequeño Stalin ya no la escuchaba, se había quedado dormido con una sonrisa en los labios,era como si realmente estuviera jugando con María, Neus y sus amigos de luz. Aquellos del cuento que su bisabuela Teresa habia creado para él.
Teresa miró al cielo con una sonrisa entre triste y agradecida.
Miraba al pequeño con ternura, triste porque tenían que devolverlo al centro.Un més más sin verlo. Sentía como si un trozo de su corazón se fuera con él cada vez que se marchaba,como si estuviera perdiéndose poder disfrutar de la vida del niño, de verle crecer, de jugar, de abrazarlo,de mimarlo.
Ten fe querida Teresa. No debe ser fácil ni para tí ni para tu hijo ver a vuestro pequeño nieto y bisnieto lejos de vuestro cariño y no poder hacer nada con las normas y estatutos gubernamentales, que la mayoria de veces entran en conflicto con las leyes del amor. Pero algún día las cosas cambiarán.
Esperemos sea pronto, apelémos a los ángeles del cuento para que os ayuden con vuestro pequeño y con otros como él.
El amor empieza y termina en el perdón, si lo pudiéramos transformar en una mera palabra se resolverian el 90% de los problemas humanitarios del mundo. Hay mucha pobreza y mucho sufrimiento.Recordemos que todos somos uno, creador y creación son una mísma cosa, al igual que las olas y el océano son uno, la conciencia que hay dentro de todos nosotros también es la mísma. Solo que nos salimos de ella provisionalmente y creamos una realidad ilusoria y dudosa en la que estamos inmersos y al no ser conscientes la seguimos recreando incontables veces.-
Nos queda mucho camino por recorrer todavía para alcanzar un conocimiento lo suficientemente grande y definido del amor, para poder mejorar muchas cosas en nuestro entorno. Influimos en nuestras vidas en nuestras familias, entorno en general, incluído el universo, aunque nos cueste creerlo.
Por lo tanto todo aquello que creemos ver o conocer, o que nos llega como información, de alguna manera nos implica, por lo cual vale la pena meditarlo de hasta donde somos responsables de todo lo que nos rodea y despertar.
Que la compasión inherente a todos los seres despierte, para poder discernir. Amar y respetar a todos los que viven a nuestro alrededor. Que somos nosotros mísmos.No somos islas aisladas sino una cadena interconectada en un proceso de búsqueda de la verdad. El dolor de los demás es nuestro dolor y su felicidad también es la nuestra, Solo hay uno de nosotros, aunque aparentemente veamos a otros que son proyecciones nuestras. No hay nadie ahí fuera, ni nada, solo proyecciones mentales de nuestro ego,pero hasta que lleguemos a ese discernimiento hemos de aprender a perdonar cualquier daño y reverenciar la bondad del mundo, para poder encontrar el camino de regreso.-
Espero y deseo querida Teresa que esta situación se arregle de forma favorable para vosotros,
especialmente para el pequeño Stalin.
No pierdas la fe de que en algún momento esto se arreglará para bién.
Aquí está mi pequeña contribución.
Mil gracias a todos por leerlo-
Compartirlo por favor es una oración. No solo para él sino para miles de pequeños Stalins y Marias que desde su inocencia piden integrarse en alguna familia para que puedan darles el amor que tanto necesitan y merecen. Que tanto todos necesitamos.
Sería injusto pensar que estamos solos aquí sin ayuda, sin amparo ninguno. Al igual que hay personas que en el anonimato ayudan a los demás. también en el anonimato de la espiritualidad hay energías que nos ayudan no a solucionar nuestros problemas pero sí a proporcionarnos de alguna manera el sosiego que necesitamos para seguir experimentando en esta ilusión que un dia elegimos vivir y ayudarnos a encontrar la verdad.-
Si miramos bién en nuestro interior, hay una llama perpétuamente encendida que nos sirve de faro, que nos ilumina el camino,cuando nos sentimos perdidos, solos, al límite, que nos guia.
Siempre en el momento preciso. Ni antes ni después, ya que no sabríamos valorarlo ni aprovecharlo.
Y aúnque nos parezcan increibles muchas de las cosas de nuestro entorno, como por ejemplo la de Stalin y otras, todas son elecciones propias , pero al hacernos conocedores de ellas, la compasión y el amor hace mover nuestro corazón e implicarnos, sea como sea, con oraciones, escribiendo historias, leyéndolas compartiéndolas. etc cada uno con lo que pueda aportar.Y así es como aprendemos a amar a los demás porque no hay demás, todos somos uno.
Mil gracias por leer mis historias y compartirlas.
Luz y progreso.
Aunque ya pasó la Navidad, pienso que este cuento os alegrará un poco y aligerará de preocupaciones.
